CANCÚN, 16 de Junio 2010.
CONSTE!
Avionazo ¿sin culpables?
+ La responsabilidad de la empresa de Hendricks Díaz
+ Félix González Canto le endosa a Borge a sus socios
+ Oscuros negocios en las cúpulas de Quintana Roo
Por CARLOS CANTÓN ZETINA*
carlos_cantonz@hotmail.com
Al fin su “padrino” político, pues fue quien contra viento y marea lo impuso como candidato del PRI a gobernador, Félix González Canto le impone ahora a Roberto Borge Angulo a sus amigos y socios, auténticas “malas compañías”. Esos personajes ya le empiezan a hacer daño incluso antes de llegar al Palacio de Gobierno de Chetumal --como inexorablemente ocurrirá, tras sacar de la jugada a Greg--, sobre todo el siniestro Joaquín Hendricks Díaz.
El avionazo del domingo 13 en el municipio de Felipe Carrillo Puerto donde fallecieron 9 allegados a Borge, principalmente su jefe de seguridad, Fernando Marchán, puso nuevamente al descubierto la oscura red de complicidades en la cúpula gubernamental de Quintana Roo.
Desde el inicio de su gestión, en 2005, González Canto ha sido extremadamente generoso con quien lo nombró candidato del tricolor y lo hizo gobernador: Hendricks. No ha importado que éste haya sido de manera reiterada como corrupto y hasta de tener nexos con el narcotráfico, igual que sus aliados y socios comerciales Kamel Nacif y el pederasta Jean Succar Kuri.
La aeronave Caravan que se desplomó en plena selva pertenecía a una empresa cuyo director es Edgar Hendricks Rubio, hijo del ex gobernador.
Quizá debido a ese pequeño dato, tanto el actual mandatario estatal como “su” candidato priísta se apresuraron a machacar que “fue un accidente”, sin esperar el resultado de la investigación correspondiente y la cual está a cargo del gobierno federal, a través de la Dirección de Aeronáutica Civil de la SCyT.
Fueron evidentes los gestos de molestia de González Canto y Borge cuando reporteros locales les preguntaron si podría haber sido un atentado. “¡NO!”, replicaron, y casi a coro demandaron que “no se hagan especulaciones” sobre el caso. Ambos sabían de quién era la aeronave siniestrada pero guardaron silencio. Incluso, el abanderado del PRI, sumamente enojado, declaró que “(la empresa) es del estado de México…De Toluca”.
Hoy, los quintanarroenses merecen una amplia explicación al respecto. Que les digan por qué se ha protegido con tanto esmero a la empresa de los Hendricks y por qué no tuvo jamás una adecuada inspección y control por parte del gobierno estatal. Por qué éste se mostró tan diligente para pagar --con dineros del pueblo-- los gastos funerarios que corresponderían a la compañía aérea.
Pero no es la única empresa que, bajo el manto protector de González Canto, tiene --con inversiones millonarias en dólares-- el clan Hendricks. Son otros muchos negocios que han hecho con la tolerancia y protección del todavía gobernador. Les han dado a ganar dinero a manos llenas, aún poniendo en peligro vidas humanas, como sucedió el fatídico domingo 13.
Y ya ni hablar de la pasividad de González Canto ante los frecuentes actos de autoritarismo de la rectora de la Universidad Tecnológica de Cancún (UTC), Leslie Hendricks Rubio, la hija pródiga del ex gobernador.
¿Y qué decir del empeño de González Canto en defender a otro antecesor, el mafioso Mario Villanueva Madrid?. También su amistad con éste se la quiere “endosar” a Beto Borge.
Lo que se ve venir, en consecuencia, es que con la llegada de Borge al poder continuarán el influyentismo y la impunidad de los dos ex mandatarios estatales, porque Villanueva Madrid incluso en prisión encabeza a un poderoso grupo político-económico al que no es ajeno el señor Félix.
Esa maraña de complicidades que bastante ha afectado a Quintana Roo, ¿aceptará heredarla Borge?. Hasta ahora, todo indica que sí. Su actitud sumisa, entre otras “cualidades”, lo hicieron merecedor del “dedazo” de González Canto, quien encontró en él a la persona idónea que le tapará sus corruptelas y omisiones. ¡Por eso es el candidato!.
Y de que Félix fue impuesto por Joaquín Hendricks como su sucesor --como ahora aquél lo hizo con Beto--, no hay la menor duda. Fíjese usted: el pasado 15 de marzo, cuando el ex gobernador reapareció en la escena política con motivo del quinto informe de González Canto, aseguró a la prensa que no estaba arrepentido de haber “ayudado” a Félix a ser su sucesor. Reconoció que en 2004 decidió que fuera el candidato del PRI a la gubernatura, y no Víctor Alcérreca, entonces considerado el “delfín” oficial. O sea, Hendricks le “recordó” al actual gobernador quién lo llevó al poder. ¡Así de cínico!...
En Wikipedia, la enciclopedia cibernáutica líder en el mundo, se añade esto a la biografía de Félix González Canto:
“Fue electo candidato a gobernador de Quintana Roo por el PRI en medio de acusaciones de que era favorecido por el entonces gobernador, Joaquín Hendricks Díaz, lo que causó la renuncia al PRI de la senadora Addy Joaquín Coldwell, quien fue postulada por el PAN…”
(Igual señalamiento quedará, para la posteridad, cuando se haga referencia a Roberto Borge Angulo).
En cuanto al oscuro caso de la empresa que era dueña del avión que provocó nueve lamentables fallecimientos, el experimentado periodista Fernando Meraz --compañero que fue de este columnista, en Excélsior-- hizo un documentado y profesional trabajo periodístico para el diario Milenio del cual es corresponsal en Cancún. Eso, el mismo día --martes 15 de junio-- en que González Canto repetía y se contradecía él mismo: “No quisiéramos caer en ninguna especulación… es un lamentable accidente que le tocará a cada instancia de los diferentes niveles de gobierno determinar cuáles fueron las causas… no es hora de buscar culpables”.
O sea: el gobernador convertido en juez y parte, ya “dictaminó” que fue un accidente, pero dice que la investigación (a cargo del gobierno federal) es la que determinará la verdad de lo sucedido. Dice no especular, pero él especula. ¡Qué cantinflesco!.
Por ser de sumo interés para los quintanarroenses, transcribimos aquí el espléndido reporte de Fernando Meraz:
Cancún.— La dirección de Aeronáutica Civil de la secretaría de Comunicaciones y Transportes citó a Edgar Hendricks Rubio, hijo del ex gobernador Joaquín Hendricks y director de la empresa dueña del avión Caravan que se desplomó el domingo con nueve personas que perdieron la vida.
El principal accionista de Grupo Aéreo Xiknal S. A. es el ex gobernador Hendricks, quien la integró en sociedad con Servicios Aéreos Milenio, señalada como responsable de accidentes ocurridos a políticos y funcionarios; el más grave fue un helicóptero Augusta del gobierno de Puebla que se cayó en 2008 con ocho pasajeros que murieron, entre ellos la esposa del secretario de gobierno de esa entidad, Patricia Rossano.
La investigación por el accidente registrado en domingo en el municipio de Felipe Carrillo Puerto es realizada por inspectores de Aeronáutica Civil y la Procuraduría General de la República, con apoyo de la fiscalía quintanarroense, que viajaron al sitio en donde cayó el aparato, en plena selva, en el ejido San Antonio Nuevo.
El Grupo Aéreo Xiknal Sociedad Anónima se constituyó en 2006, aunque en su publicidad garantiza su servicio con “una década de experiencia”; Servicios Aéreos Milenio entregó tres aeronaves para formar la empresa y Hendricks se comprometió a obtener contratos con los gobernadores de otros estados para hacer crecer la empresa.
El director de Xiknal, Edgar Hendricks Rubio, deberá declarar sobre las condiciones en que se encontraba la aeronave accidentada el domingo y realizar los trámites que indique la dirección de Aeronáutica para retirar los restos del avión y cobrar el seguro correspondiente.
La delegación estatal de la procuraduría General de la República notificó que un agente del Ministerio Público Federal levantó actas sobre el siniestro, pero consideraron probable que por el hecho de que el accidente no causara daños a propiedad federal, la PGR lo turne a la procuraduría de Justicia de Quintana Roo.
La concesión de transporte aéreo a Xiknal, representada por Edgar Hendricks fue entregada por la dirección de Aeropuertos y Servicios Auxiliares, el primero de noviembre de 2009 y vence el 31 de octubre de 2012.
En su página Web los responsables de Xiknal apuntan: “Somos una empresa con una década de experiencia en el Mercado del taxi aéreo, Grupo Aéreo Xiknal (Volar en lengua maya) se ha consolidado en Quintana Roo gracias al servicio, calidad y sobre todo a la seguridad, contamos con las aeronaves más seguras “Cessna 208 Grand Caravan”.
Los aviones entregados por Servicios Aéreos Milenio, cuyo propietario es el empresario poblano Ricardo Urzua fueron dos Grand Caravan C-208, uno con matrícula XA-TWK , que fue el caído y el otro XA-MUR, que suele utilizar el ex gobernador Hendricks Díaz.
Los registros y el mantenimiento se mantienen con registros de Servicios Aéreos Milenio, con base en Toluca.
Esta empresa ha sido señalada en la investigación de accidentes a políticos y también en escándalos financieros gubernamentales.
En diciembre de 2003, el alcalde de Tlalnepantla, Ulises Ramírez, estrenó un helicóptero Bell-407 contratado a Servicios Aéreos Milenio con opción a compra a tasa de 16 mil pesos hora-vuelo; Al cabo de protestas del cabildo se canceló el contrato en febrero de 2005.
El gobierno de Puebla compró en 2005 un helicóptero Augusta Grand en más de cuatro millones de dólares; poco después la operación se canceló después que un dictamen de expertos solicitado por el gobierno que mostró que el motor estaba sobrecalentado y sobrerevolucionado, lo que no le permitía volar con seguridad.
En 2007 el cabildo de Atizapán de Zaragoza, Estado de México increpó al edil Gonzalo Alarcón, el alquiler a Servicios Aéreos Milenio de dos helicópteros, un Bell-206 y otro Bell- 407 en 17 mil pesos hora de vuelo, costo promedio fuera de parámetros.
El ex presidente municipal de la ciudad de Puebla, Enrique Dóger, se vio también en un escándalo parecido en 2006 con el helicóptero “El Cóndor”, contratado para realizar operativos de noche, presentó una cuenta de 900 dólares por hora-vuelo que orilló a cancelarlo.
Después servicios Aéreos Milenio fue implicada en un accidente en el que murieron ocho personas entre las que estaba Patricia Rossano, esposa del secretario de gobierno de Puebla, Mario Montero, al estrellarse el helicóptero en que viajaban en la sierra Norte, el 11 de enero de 2008.
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*CARLOS CANTÓN ZETINA es un periodista tabasqueño con una vasta trayectoria a nivel nacional, de 45 años. Fue reportero y Jefe de Información del diario Excélsior, y director general de las revistas Quehacer Político, Polémica y Huellas.
